domingo, 8 de enero de 2012

Carta al director de El Sur


Sr. Director:
En relación a la refutación de Ríos Piter publicada el día de ayer sobre mis consideraciones respecto a su persona, en verdad le digo a ese joven malformado político que no me pida pruebas de mis dichos cuando lo increpo, sin ambages, por su desmedida ambición, carencia de escrúpulos, escaza ideología progresista, acrecentada ingratitud y ayuno total de ética política. Lo acuso de pillín, no de tonto. Aún cuando sus supuestas muchas luces enarboladas, terminan por ofuscarle la buena inteligencia. Al grano:
Ha brincado políticamente, y en forma por demás meteórica, del PRI al PAN y después al PRD, cuando éstos están en el poder, a despecho de una militancia efectiva y prolongada. Sí o no.
Puso la Secretaría de Desarrollo Rural (recursos y personal) al servicio de su interés político particular antes de los intereses de los campesinos. Ahora lo intenta a través de la Semaren, junto con la de Asuntos Indígenas y alguna otra más. Sí o no.
Se dio a conocer como mentiroso cuando manifestó públicamente que no sabía nada de una Fundación establecida para financiar su pre candidatura política en las pasadas elecciones locales ¡cuando su esposa era la presidenta de la misma! Sí o no.
Del PRI, no solo recibió apoyo de Figueroa Alcocer para ganar las elecciones a diputado federal  por la Costa Grande sino también de dirigentes morales de la CNC nacional. Sí o no.
Fue el delfín político de Zeferino Torreblanca para contender por la candidatura del PRD a la gubernatura del estado. Constatado al expresar reiteradamente y con angustia: “Ya se lo consultaron al gobernador”, cuando le dieron a conocer que no era el agraciado. Sí o no.
Cuando buena parte de la dirigencia del PRD se avino con la candidatura de Ángel Aguirre los calificó públicamente de ¡nalgas prontas! Sí o no.
Rubén Figueroa declaró públicamente el año pasado que ya lo veía como senador de la República. Por lo demás, nunca ha criticado explícitamente la actuación política de Figueroa ni de Zeferino que tantos golpes políticos han propinado al PRD. Sí o no.
“El que se fue a la villa perdió su silla” lo expreso públicamente con desenfado cínico cuando Alejandro Encinas, tenaz y honesto veterano luchador de la auténtica izquierda, regresó a la cámara de diputados para asumir la coordinación parlamentaria que de buena fe le dejó en forma transitoria. Sí o no.
El rápido desprestigio político de su persona no es de mi autoría, se lo ha ganado a pulso. Yo tan solo doy razonables fundamentos de su proceder. Más sin embargo, si desea recapacitar y enmendar estoy dispuesto a buscar la unidad por el bien de Guerrero. Soy de aquellos que por veterano de la era del centenario menester tengo de pasar la estafeta del compromiso social a los jóvenes políticos que no sean bebe-saurios.
Pero hasta aquí dejo, por el momento, esta interesante polémica para seguirla en el transcurso de la semana. ¿Sí o no?
Héctor Manuel Popoca Boone.

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